Jugar «Gato» para diseñar mejores futuros

La idea:

Desde niña me ha interesado muchísimo el cómo funcionan las cosas, recuerdo que tenía un patito granjero que al oprimirle la pancita emitía una melodía propia de una granja, me entusiasmaba y me daba una curiosidad mórbida el saber qué o quién hacía que el patito sonara.

Un día, cuando estaba al borde del desquicio debido a mi curiosidad, no pude más e intervine quirúrgicamente al patito, honestamente me desanimó un poco el hecho de descubrir que lo que hacía que el patito sonara no era más que una caja de plástico con pilas, cables y unos agujeros desde donde salía el sonido. Quizás esperaba descubrir un mini piano o algo más «asombroso», sin embargo, pese a mi decepción, algo en mi interior se encendió y se activó al igual que aquella caja de melodías.

Es justo esta curiosidad la que me ha llevado a abrir y cuestionar cada objeto, teoría, propuesta, libro y una que otra persona (metafóricamente hablando) que se me ha atravesado en la vida.

Estoy segura que este es el origen de mi afición por los métodos y metodologías, me parece extraordinario el ejercicio de síntesis que algunos seres humanos han logrado accionar para hacer parecer simple hasta lo más complejo.

Mientras estaba estudiando “Diseño del Mañana” (Prospectiva), me cuestioné seriamente qué herramienta podría crear para permitir que un tema tan complejo y sistémico como es el futuro (o los futuros, mejor dicho) pudiera ser comprendido y utilizado por cualquier persona interesada en hacerlo.

Fue entonces cuando decidí comenzar a bocetar una idea que compartiré contigo y que espero no solo te sea de utilidad sino que también te vuelvas parte de su mejora, diseño y transformación.

Cuando comencé a darle forma a esta herramienta, pensé en muchas ideas, algunas tenían que ver con diseños muy complicados y otras por el contrario, me parecían demasiado simples. Volví a repasar muchas de las herramientas y métodos vistos en clase, lo que indudablemente complicó más la situación porque cuando pensaba en una nueva idea mi mente decía que esa cualidad ya la tenía otro modelo.

Finalmente, se me vino a la cabeza un juego que seguramente muchas personas han jugado, se le conoce como Ceros y cruces, Tres en raya, Michi, Juego del gato, Triqui, Cuadritos, Gato, Tatetí, Totito, Triqui traka, Equis Cero, Tic-Tac-Toe. Con eso en mente, voy a proceder a explicar cómo funciona.

Como sabes, este juego es prácticamente una matriz de 3 x 3, por otro lado, el proceso genérico de diseño de futuros prácticamente se resume en 4 etapas: Inputs, foresight, outputs y estrategia. Mi intención es centrarme en las 3 primeras fases ya que desde mi perspectiva si cuidas estas fases, como consecuencia la cuarta fase tendrá orgánicamente, una visión ética, lo único que seguirá, será crear un plan estratégico para accionarlo.

Estas tres fases son interdependientes. No se puede crear prospectiva sin inputs y no hay resultados o outputs sin las otras dos. Una decisión ética, vista desde esta herramienta, es aquella que nos brinda en las tres fases, una óptica o un filtro ético que nos permite a su vez, tomar mejores decisiones y sobre todo plantear mejores futuros. La verdadera dificultad está en que hay que tomar decisiones en cada una de las fases mientras el contexto está en constante cambio. 

Ahora bien, ya tenemos tres fases: inputs, foresight y outputs. ¿Qué hay en el otro eje de la matriz? También tenemos tres niveles: personas, planeta y propósito, este puede ser personal u organizacional dependiendo cómo se esté trabajando. 

Dado que todo está interconectado, cada nivel puede afectar a otro: un cambio en la variable llamada planeta puede influir en nuestra fase de inputs, por ejemplo, o un cambio relacionado con las personas podría hacer nuestros futuros menos deseables. 

La propuesta

A fin de pasar a la práctica, dibujemos una tabla con una columna para cada una de nuestras fases —inputs, foresight y outputs— y una fila para cada nivel: personas, planeta y propósito. Esto nos proporciona una cuadrícula con nueve casillas, cada una de las cuales contiene un factor que afecta a nuestro resultado y que cuando los consideramos conjuntamente nos dan una visión integrada. 

Pasemos a la pregunta importante, ¿qué hay dentro de las nueve casillas? Explicaré una por una, comenzando con la llamada: inputs.

Elementos horizontales

Inputs

Existen un sinfín de herramientas para la fase de inputs: desde métodos tan robustos como un Delphi, o simplemente un análisis de tendencias, thick data, entrevistas, etc. Sea cuál sea nuestro método seleccionado en esta fase, debemos pensar en las personas y sobre todo en quién o quiénes resultarán beneficiadas y/o afectadas, al final del día si afectamos a las personas, dado que esto es sistémico, podemos esperar que eso tarde o temprano también nos afecte.

Aunque un cambio en esta variable también puede actuar en nuestro beneficio, ya que, si los deseos y necesidades de las personas se alinean con lo que ofrecemos, podemos diseñar futuros con mucha más empatía.

Foresight

El segundo elemento es la fase de foresight, dado que en esta fase es donde se analiza, interpreta y se hace la prospección hacia el futuro (o futuros), lo más importante aquí es cuestionarse y alinear los intereses de los clientes (personas) y los nuestros. Sobre todo, cuestionarnos si estamos perpetuando, o no, los errores del pasado y del presente. 

Cuando se tiene una posición dominante se puede caer en la afectación a los usuarios, por eso es importante sumarlos también al proceso de construcción de escenarios.

Outputs

El tercer elemento son los outputs y es la fase donde, desde mi perspectiva la pregunta más importante es: ¿cuáles son nuestros posibles escenarios y que necesitaríamos hacer en cada uno para conseguirlos o evitarlos? 

Y es aquí, de nueva cuenta, donde tenemos que cuestionarnos si de verdad mejoraremos o empeoraremos la situación actual, no solo desde nuestra postura sino pensando en el usuario, sobre todo, si pensamos que los resultados del trabajo de prospectiva normalmente derivan en dos tipos: tangibles e intangibles y las preguntas que plantea esta herramienta se concentran en los resultados intangibles porque son los que necesitan un cambio en el pensamiento generado en conjunto.

Pasemos entonces a los elementos verticales que se enlistan de arriba hacia abajo y son: personas, planeta y propósito.

Elementos verticales

Personas

Al final del día, cada decisión que tomamos, sobre todo en temas de prospectiva tiene todo que ver con las personas ya que el futuro es un bien común que en el mejor de los casos debería construirse en conjunto, así que es un elemento crucial pensar qué afectaciones tendrán para bien y para mal las decisiones que tomemos, ahora, cuando decimos personas no solo nos referimos a los usuarios sino a todas las personas involucradas en el proceso (eso incluye a los que no son tus usuarios o clientes).

Planeta

Más allá del tema climático que es sin duda un gran conductor de cambio, desde mi perspectiva en los modelos que revisamos en clase, no se consideraba este elemento, o al menos no explícitamente, sin embargo, es obvio que si no existe el planeta, no puede existir el futuro, así que es muy importante que pensemos si las decisiones que tomamos promueven o frenan el daño.

Propósito

Va más allá del objetivo, es de verdad lo que nos mueve y puede ser visto desde el punto de vista de profesionales en futuros o bien, como compañías, organizaciones, instituciones y está basado sin duda en los valores a los que estamos sujetos.

Ahora que ya revisamos cada elemento se puede apreciar de manera más clara que todos los elementos son importantes y sobre todo que si alguna de estas nueve variables es olvidada, no se profundiza o se ignora, eso puede conducirnos a tomar decisiones equivocadas o al menos con una visión poco ética. 

Las preguntas por resolver en cada uno de los elementos son:

Son preguntas que sin duda se pueden ir ajustando con el paso del tiempo o con los diferentes contextos, pero son una buena base para comenzar y sobre todo tener un momento de reflexión y análisis sobre el presente y cómo estamos proyectando las señales hacia el futuro.

De modo que, para poder explicar mejor cómo funciona tomé como ejemplo el tema del futuro del sistema de fondo de ahorro para el retiro en México, asumiendo que somos una compañía aseguradora que se está preguntando cuál será el panorama o cuál debería ser, en una línea temporal de 10 años, es decir, con miras a 2031.

*Futurible se refiere a futuro posible.

Puedes descargar el PDF de esta imagen, en alta resolución, aquí.

¿Recuerdan que habíamos mencionado que esta herramienta está inspirada en el Juego del gato? Pues bien, utilizando este ejemplo podemos revisar que hay divisiones, que según las respuestas evidencian, que no están contempladas, por lo que son puntos débiles en los que se debe trabajar y tal cual sucede en el Juego del gato marcaremos con una cruz y/o un círculo, la cruz corresponderá a los elementos que están por trabajarse y los círculos a los elementos que ya cubrimos.

De este modo, será muy sencillo darnos cuenta en qué cruces de la matriz tenemos áreas de oportunidad y en dónde no, por lo que hemos asignado los siguientes valores para que al momento de usar la herramienta tengamos indicadores del filtro ético, los cuales son:

Como puede observarse, una visión ética integral no está garantizada si solo tenemos círculos en una o dos áreas, sino que surge de las nueve variables de la matriz. Como es natural, habrá ocasiones en que alguna esté mejor resuelta que otras, pero pasar por alto una variable por completo puede, como lo mencioné anteriormente, afectar a todo el sistema y eso es lo valioso de la herramienta desde mi punto de vista, que acentúa las interrelaciones y correlaciones que existen entre un elemento y otro.

¿Qué te parece? Déjame tus comentarios.